OPINIÓN AMFAR
ALMUDENA GUIJARRO
(Presidenta de AMFAR Cuenca) BEGOñA GARCíA
(Secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación ) CARMEN CANDA
(Presidenta de AMFAR Galicia) CHELO AZNAR
(Presidenta AMFAR Zaragoza) CRISTINA CLAVELL
(Presidenta de AMFAR Cataluña) EDUARDO COCA
(Cazador y escritor) LAURA MARTíN
(Agricultora) LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR) LUCíA MARTíN
(Comisión Ejecutiva Alianza Rural) MANUELA REDONDO LUIS
(Presidenta de AMFAR Valladolid) MARíA TERESA RESINA
(Presidenta de AMFAR Ávila) MARíA TERESA RESINA
(Presidenta de AMFAR Ávila ) MICHELLE BACHELET
(Directora ejecutiva de Naciones Unidas) MIGUEL ÁNGEL VALVERDE MENCHERO
( Presidente de la Diputación de Ciudad Real) ROSA PRUNA
(Presidenta de AMFAR Cataluña) VíCTOR YUSTE
(Director General Foro Interalimentario)
(Presidenta de AMFAR Cuenca) BEGOñA GARCíA
(Secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación ) CARMEN CANDA
(Presidenta de AMFAR Galicia) CHELO AZNAR
(Presidenta AMFAR Zaragoza) CRISTINA CLAVELL
(Presidenta de AMFAR Cataluña) EDUARDO COCA
(Cazador y escritor) LAURA MARTíN
(Agricultora) LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR) LUCíA MARTíN
(Comisión Ejecutiva Alianza Rural) MANUELA REDONDO LUIS
(Presidenta de AMFAR Valladolid) MARíA TERESA RESINA
(Presidenta de AMFAR Ávila) MARíA TERESA RESINA
(Presidenta de AMFAR Ávila ) MICHELLE BACHELET
(Directora ejecutiva de Naciones Unidas) MIGUEL ÁNGEL VALVERDE MENCHERO
( Presidente de la Diputación de Ciudad Real) ROSA PRUNA
(Presidenta de AMFAR Cataluña) VíCTOR YUSTE
(Director General Foro Interalimentario)

15 de octubre, Día Mundial de la Mujer Rural
15/10/2012
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
Hoy, 15 de octubre, se conmemora el Día Mundial de las Mujeres Rurales. La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural, AMFAR, que fue pionera en España en la celebración de esta efeméride en el año 1997, ha organizado una veintena de actos en distintos puntos de la geografía nacional para poner de relieve la importancia de la labor desarrollada por las mujeres en la economía familiar, el desarrollo rural y el campo español.
Un trabajo esencial para el mantenimiento de las zonas rurales, que además se ha convertido en el principal instrumento de fijación de población, empleo y biodiversidad.
En España viven casi seis millones de mujeres rurales que representan la tercera parte de la sociedad española femenina. Un colectivo que tiene una estrecha vinculación con el sector agrario, ya que según datos del Ministerio de Agricultura, uno de cada cuatro profesionales del campo es mujer. Lo que representa el 26% de los trabajadores del sector agrario español.
Un dato revelador en el sentido de que no representa la verdadera dedicación de las mujeres en las explotaciones agrarias, ya que no incluye a más de 700.000 mujeres, según datos gubernamentales, que estarían realizando labores agrícolas en calidad de “ayuda” o “colaboración familiar”.
Nuestra sociedad rural está fuertemente envejecida y masculinizada, de hecho, los mayores de 65 años en las zonas rurales doblan a la media nacional. Concretamente, uno de cada seis habitantes rurales tiene más de 70 años, una cifra que se hace más extrema cuanto más pequeño es el núcleo de población.
La media de edad de las mujeres rurales ronda los 55 años y cada vez nacen menos niños y se tienen más tarde. Además de ser más numerosos los mayores y personas dependientes que requieren cuidados sanitarios y atención especializada.
Ante esta situación, la juventud rural no está dispuesta a arriesgar tanto como han arriesgado las generaciones anteriores. La escasa valoración del trabajo desempeñado por las mujeres rurales ha supuesto que muchas de las más jóvenes hayan decidido irse de los pueblos en busca de formación y un trabajo remunerado.
Lo que pone de relieve la urgencia de invertir en las mujeres como verdaderos agentes de desarrollo rural y generación de empleo. Debemos ser cómplices con el espíritu emprendedor de las mujeres y ayudarles a crear empresas en el medio rural.
El impulso a este espíritu emprendedor, lleva aparejada la puesta en marcha de las medidas y políticas activas necesarias que faciliten la apertura de sus negocios, propiciando la creación de puestos de trabajo, fijando la población y dinamizando el entorno.
Estoy firmemente convencida de que esta promoción del autoempleo y del espíritu emprendedor de las mujeres rurales es posible en el mundo rural. Un convencimiento que también tienen las propias mujeres que son conscientes de los recursos y posibilidades que les ofrece su entorno, y están dispuestas a aprovechar como nuevas oportunidades de negocio y empleo.
Con la confianza de que seguiremos avanzando en la igualdad de oportunidades, aprovecho la ocasión para rendir un merecido homenaje a los casi seis millones de mujeres rurales españolas que solo con su presencia están garantizando la vida y la supervivencia del 80% de nuestro territorio y para reclamar el reconocimiento justo y merecedor de su labor.
LEER MÁS

La mujer, pilar de la familia y del mundo rural
07/03/2012
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
La mujer rural española es un colectivo de casi 5 millones, con una media de edad de 50 años, casada y con hijos. La mayoría de ellas se declara “ama de casa”.
En el sector agrario trabajan como titulares de explotación un total de 500.000 mujeres que suponen el 29% de los titulares de explotación en España, aunque se estiman en más de 750.000 mujeres, las que en calidad de “ayuda familiar”, dedican una parte importante de su tiempo a sacar adelante las explotaciones agrarias.
Estas 750.000 mujeres, según un estudio realizado por el Instituto de la Mujer, aportan un total de 770 millones de horas anuales a labores agrícolas y ganaderas, de las que el 78% no son retribuidas.
Desde AMFAR, Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural, hemos trabajado duramente para que se dignifique el trabajo que desempeñan estas mujeres y conseguir una verdadera equiparación de derechos con los profesionales del campo.
Una reivindicación que ha calado en el Gobierno nacional ya que por fin, las mujeres del campo podrán disfrutar de la igualdad que les corresponde por derecho a través de recién aprobada Ley de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, que entró en vigor el pasado 5 de Enero de 2012.
Hasta ahora, el trabajo de las mujeres era considerado como “extensión de las tareas domésticas” y su estatus laboral se definía más por la relación familiar que ostenta con el titular de la explotación (esposa, hermana o hija) que por el trabajo que desempeñaba en la explotación.
La incorporación de la mujer al mundo laboral ha sido uno de los grandes hándicap del colectivo femenino rural, pero no es el único. Existen otros muchos aspectos que dificultan su avance hacia la igualdad efectiva con respecto a los hombres.
La solución pasa, entre otras cuestiones, por un cambio de mentalidad. El mundo rural vive todavía inmerso en una sociedad mucho más tradicional, en la que la mujer sigue ocupando un segundo plano.
Además, hemos de esforzarnos en dar una imagen real de lo que es el mundo rural español. Desgraciadamente sigue existiendo un gran desconocimiento de la vida en los pueblos, lo que constituye un freno añadido para alcanzar nuevas metas en todos los aspectos de la vida social, económica y cultural.
La última Encuesta de Población Activa desvela que más de un millón y medio de familias se encuentran con todos sus miembros en el paro. Todas ellas tienen graves problemas económicos para llegar a fin de mes, y donde la mujer, pilar básico de la familia, representa el apoyo, las palabras de aliento y la fortaleza para salir adelante.
Esta crisis ha forzado a miles de amas de casa a buscar un puesto de trabajo fuera del hogar. Mujeres que hasta ese momento se encargaban de las tareas domésticas y del cuidado de todos los miembros de la familia: de los hijos, los nietos, de los mayores, de los enfermos, discapacitados, o dependientes y que ahora buscan salir adelante complementando su jornada con otro trabajo remunerado.
Y en pleno siglo XXI, las mujeres seguimos reclamando que se conozca nuestra verdadera situación laboral.
A día de hoy se sabe poco de nuestra realidad. Se desconoce cómo nos afecta la crisis económica o el paro, o los problemas que tenemos para encontrar un puesto de trabajo que pueda ser compatible con nuestra actividad familiar diaria.
Tenemos escasa participación en los órganos de decisión y problemas de acceso a las nuevas tecnologías de la comunicación.
Sin embargo, desde AMFAR afirmamos sin miedo que las mujeres son vitales para el mantenimiento de la vida en los pueblos y de las explotaciones agrarias.
La mujer rural es el pilar sobre el que se sustenta una familia y por extensión un municipio, por lo que es imprescindible atender sus necesidades para frenar el envejecimiento, la emigración y por tanto, fijar la población.
Con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer, el próximo 8 de marzo, la Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR) alza su voz para reclamar un mayor y mejor aprovechamiento de los recursos que tienen las zonas rurales para conseguir un desarrollo rural sostenible y que las mujeres y los jóvenes sean los protagonistas de dicho desarrollo.
Con esta medida, sería posible un mundo rural activo, dinámico, con capacidad de generar empleo y fijar la población, para ello es necesaria la implicación de las mujeres y de los jóvenes y un compromiso verdadero de las instituciones que los acompañen en la puesta en marcha de sus iniciativas emprendedoras.
Nos hemos preocupado de la formación de nuestros hijos y también de la nuestra, pues estamos apostando fuerte por aprender y emprender en el mundo rural con el objetivo de ser independientes económicamente, de generar empleo y garantizar así la supervivencia del pueblo que nos ha visto nacer y crecer.
Las mujeres no podemos ni debemos renunciar a nuestra condición de madres por el mero hecho de tener que desempeñar un puesto de trabajo. La revolución igualitaria en el mundo laboral debe pasar por permitir que hombres y mujeres, padres y madres podamos conciliar la vida laboral y familiar.
Aunque tampoco debemos olvidar que una de las grandes barreras que tradicionalmente han impedido la plena participación de las mujeres ha sido la concepción machista de la sociedad que asignó distintos roles y funciones a hombres y mujeres, relegando a estas últimas al desempeño casi exclusivo de las tareas del hogar. Un reparto de roles que aún sigue existiendo y que es el germen de la desigualdad. Una desigualdad que llega a alcanzar su máxima expresión en la violencia ejercida contra la mujer.
Por todo ello, en un día como hoy, Día Internacional de la Mujer, debemos solidarizarnos con la mujer rural y defender sus intereses, porque también son los nuestros.
LEER MÁS

NUEVA DÉCADA, MISMO ESCENARIO
14/12/2010
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
El pasado 13 de diciembre, los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) celebraban la última reunión del año centrada en la PAC que se aplicará a partir de 2014.
El presupuesto con el que contará la futura PAC, las políticas medioambientales y la figura del “productor activo” son las cuestiones que posiblemente determinarán los próximos años del sector agrario, que hasta la fecha, ha sido el verdadero elemento de cohesión entre todos los países que conforman la UE.
Este sector que da trabajo a doce millones de agricultores que producen alimentos seguros, de excelente calidad y que alimentan a más de 500 millones de europeos, debe afrontar una nueva reforma, que esperemos consiga elevar nuestra renta, que es menos de la mitad del resto de la población.
Cabe resaltar que en la última década hemos perdido a un tercio de los agricultores en activo, así como el serio problema del envejecimiento agrario, ya que los que tienen menos de 35 años no supera el 5 % del total de los que nos dedicamos a la agricultura.
A esta situación debemos añadir la profunda crisis que padece el campo español donde más del 80 por ciento de los cultivos no son rentables. Miles de familias se están arruinando y se está poniendo en peligro la continuidad de la agricultura y la ganadería, que son la base económica de nuestros pueblos.
Y mientras tanto, nuestros dirigentes políticos se permiten el lujo de dejar pasar el tiempo sin aportar soluciones y sin elaborar un plan de futuro para el campo. Un sector agrario que todavía genera 360.000 puestos de trabajo directos en España.
En los últimos años nuestra clase política sólo se ha ocupado de hacer remodelaciones en sus órganos de dirección, de reducir algunos ministerios cargándose casualmente el de Agricultura, y de recolocar a las mismas personas en otros altos cargos de confianza.
Las mujeres rurales españolas seguimos esperando también a que el ministerio del Medio Rural de respuesta a nuestras reivindicaciones históricas.
Hasta la fecha siguen sin desarrollarse las medidas oportunas para que la co-titularidad de la mujer en la explotación agraria sea una realidad. Al igual que seguimos esperando a que se determine el presupuesto necesario para poder hacer efectivo el Plan Estratégico de la mujer rural que nos prometieron en el 2007.
Quedan muy pocos días para la llegada de la Navidad. El 2010 se acaba y las mujeres y hombres del campo en unas semanas cambiaremos de década, pero por desgracia no cambiaremos de escenario, ya que parece ser que la ansiada recuperación económica se va a seguir retrasando algo más.
Alcemos nuestras copas, y brindemos por la paz y la felicidad, acordémonos especialmente en estos días de los que lo están pasando peor y pidamos a los Reyes Magos que nos traigan para el próximo año mejores políticos y una buena PAC que colme a España de buenas nuevas, que falta nos hacen.
No perdamos nunca el espíritu de la Navidad.
LEER MÁS

El sueldo del ama de casa es de 1.750 euros al mes
08/10/2010
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
Son mujeres, madres, esposas, educadoras, enfermeras, psicólogas, economistas, taxistas, limpiadoras… al pie del cañón 24 horas al día, los 365 días al año. Ellas son las amas de casa. Un colectivo de 5,3 millones de mujeres españolas que dedica buena parte de su existencia a realizar un trabajo gratuito y sin derecho a ninguna prestación social.
Hoy, 9 de octubre, es el Día del Ama de Casa, y desde Amfar, organización que presido, queremos rendir un merecido homenaje a este colectivo que dedica su tiempo casi exclusivamente al cuidado de la familia, de los enfermos, de los niños, de los dependientes y de las tareas del hogar. Un trabajo cotidiano y duro que obliga cada año a más de 90.000 mujeres trabajadoras a abandonar sus empleos para atender el cuidado de sus familiares y hogares.
Quisiera también resaltar que las mujeres que se ven obligadas a sacrificar su vida profesional en beneficio de la familia, son con mayor frecuencia, aquellas que viven en el medio rural, donde la falta de infraestructuras educativas, sanitarias y sociales, prácticamente las obliga a tomar esta determinación.
El trabajo de una mujer en el hogar no es nada fácil. No tiene horario fijo, ni vacaciones, ni bajas laborales, ni permiso para asuntos personales. Son demasiadas horas dedicadas al día a múltiples tareas. Y los fines de semana o en periodo de vacaciones, cuando a la mayoría de los trabajadores les llega el tiempo de descansar, ellas asumen un carga mayor de trabajo atendiendo a toda la familia y los quehaceres de la casa.
Según un cálculo elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), si este trabajo se pagara, las amas de casa deberían cobrar 424.140 millones de euros brutos anuales. Otro estudio elaborado por la Escuela Superior de Administración y Dirección de Empresas (Esade) señala que las amas de casa deberían cobrar 1.750 euros al mes por el esfuerzo y la responsabilidad que desempeñan.
Todo un sueño para este colectivo que no percibe ningún ingreso a cuenta por su trabajo y que además supera la edad de jubilación en muchos casos. Sin olvidar a los más de tres millones de mujeres que doblan su trabajo dentro y fuera de la casa. Un sector que genera riqueza a cambio de nada.
En abril de 2009, el gobierno nacional anunció que las amas de casa podrían obtener un título para trabajar, una medida desesperada para tratar de contrarrestar las galopantes cifras del paro que acucian nuestro país.
Este anunció se materializó meses más tarde, en julio del mismo año, en un Real Decreto sobre Acreditación de la Formación “para aquellas que hayan trabajado organizando la vida doméstica, aprovisionando la casa o cocinando, que hayan cuidado a personas dependientes o a sus hijos”, según manifestó la entonces ministra de Educación, Mercedes Cabrera.
La aprobación del Real Decreto venía acompañada de un presupuesto de 3,5 millones de euros para evaluar y acreditar las competencias de unas 8.000 personas. Espero que este Real Decreto no haya sufrido la misma suerte que el cheque bebé, el permiso de paternidad de dos a cuatro semanas, o los 400 euros que se incluyeron en las nóminas o la desgravación por la compra de vivienda para todas las rentas.
Ni este Real Decreto, ni la reforma laboral, ni la huelga general, ayudan en nada a las amas de casa, que continúan al pie del cañón …¿Imaginan qué pasaría si decidieran hacer huelga alguna vez?
LEER MÁS

Ciudad Real se viste de fiesta
13/08/2010
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
Ciudad Real se viste de fiesta en estos días largos y calurosos. La Plaza Mayor ya tiene instalada la carpa para el tradicional Baile del Vermut. El Recinto Ferial está listo para comenzar su actividad cultural, y nuestra patrona, la Virgen del Prado, ya luce radiante. Todo está dispuesto para celebrar las esperadas Ferias que cada año reúnen a familiares, amigos y vecinos en un ambiente distendido y relajado, poco antes de que comience el próximo curso.
Unas fiestas que vienen muy bien para recargar pilas y afrontar con energía el último trimestre de este año 2010, especialmente duro por la crisis económica que afecta a todos los sectores económicos y sociales y por la mala gestión de un gobierno nacional en la búsqueda de soluciones.
Sin embargo, hay detalles que nos animan a esforzarnos y a seguir trabajando con ahínco. Hace algunas semanas en AMFAR tuvimos la oportunidad de disfrutar de una jornada de trabajo con APD-Castilla La Mancha (Asociación para el Progreso de la Dirección).
La jornada que estuvo dirigida a las directivas locales de nuestra organización en Ciudad Real, abordó temas tan importantes como el liderazgo y la comunicación. Los profesores, dos destacados directivos de este país, quedaron encantados con la experiencia al igual que nosotras.
Pocos días después nos dedicaron un artículo de opinión entrañable y muy emotivo en el que decían que “si a nuestros líderes (los oficiales) les pedimos capacidad de sacrificio, de control, valores, y un largo etcétera… a estas mujeres (a las que lideran AMFAR) no es necesario recordárselo, pues ellas son modelo de
algo mucho más que un líder en sus organizaciones, personales y profesionales. Ellas son líderes desde el corazón”.
Es cierto que en AMFAR lideramos desde el corazón, que nos implicamos profundamente en nuestro trabajo y que nos entregamos de lleno a la causa de conseguir una igualdad de oportunidades para la mujer rural española.
Una mujer que es dura como la tierra que pisa, que es el pilar de una familia, que trabaja duramente en la casa y en el campo, que se preocupa de la formación de sus hijos y de la suya propia para poder emprender en el mundo rural. Una mujer que mantiene la vida en los pueblos.
Desde AMFAR apostamos fuerte por aprender y emprender porque queremos ser independientes, generar empleo y garantizar así la supervivencia del pueblo que nos ha visto nacer y crecer.
Quiero animaros en estos días de agosto a disfrutar de las fiestas y de las tradiciones, esas que nos diferencian y nos hacen ser tan especiales.
La inmensa mayoría de nuestros pueblos, por pequeños que sean, celebran sus fiestas patronales a lo largo de estos meses de verano, y hemos de aprovecharlas para mantener vivas nuestras costumbres y nuestra esencia, esa que nos distingue como buena gente y como buenos manchegos.
Que pasen un feliz verano y unas felices fiestas!
LEER MÁS

Humo feminista en la presidencia española de la UE
08/04/2010
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
La ministra del Medio Rural, Elena Espinosa, ha manifestado que una de las tres prioridades agrarias de la presidencia española de la UE es el colectivo de mujeres rurales, junto con el futuro de la PAC más allá del 2013 y la mejora de la competitividad en la industria agroalimentaria.
Un titular que debería servir de motivo de satisfacción pero prefiero ponerlo en cuarentena, pues con este gobierno hemos adquirido la experiencia para saber que tras estos anuncios a bombo y platillo, no hay otra cosa que la venta de humo feminista que no cuaja en nada concreto.
Llevamos ya seis años del gobierno de Rodríguez Zapatero y aún no han tenido tiempo de desarrollar el Real Decreto que reconoce la cotitularidad de la mujer en la explotación agraria, ni tampoco de darle contenido al Plan Estratégico de la Mujer Rural recogido en la Ley de Desarrollo Rural Sostenible, ni de dar cumplimiento a la Ley de Igualdad.
La realidad habla por si misma: el gobierno de ZP ha malgastado una buena parte de su mandato en aprobar un elenco de leyes para vendernos una igualdad ficticia y engañosa a las mujeres, en general, y a las rurales, en particular.
Visto lo visto no creo que el ex Ministerio de Agricultura sea capaz de hacer en seis meses por la mujer rural europea, lo que no han hecho por las españolas en seis años de gobierno.
Las mujeres rurales no nos merecemos este trato. Somos cinco millones en España y nuestra realidad cotidiana se merece, al menos, el respeto y el justo reconocimiento por parte de nuestras instituciones.
La mujer rural española es dura como la tierra que pisa, pero esto no es óbice para pasar de puntillas sobre nuestros problemas y nuestras necesidades. Nosotras somos el pilar de una familia, trabajamos duramente en el campo y mantenemos la vida en los pueblos.
Nos hemos preocupado de la formación de nuestros hijos y también de la nuestra, pues estamos apostando fuerte por aprender y emprender en el mundo rural con el objetivo de ser independientes económicamente, de generar empleo y garantizar así la supervivencia del pueblo que nos ha visto nacer y crecer.
Como respuesta a nuestro esfuerzo, nos topamos con un gobierno y una ministra que no avanzan en nuestras reivindicaciones, pero que no dejan de decir que somos “las vertebradoras del territorio rural y las diversificadoras de la actividad económica tradicional, necesarias para poder conseguir un medio rural dinámico y sostenible”.
Eso sí, en vistas de que no recibían el apoyo de organizaciones como Amfar que llevamos casi veinte años defendiendo a las mujeres rurales, han creado su propio club de fans para pasearse por toda España vendiendo humo de la mano de la vicepresidenta del gobierno, Fernández de la Vega y del secretario general de UGT, Cándido Méndez.
Me gustaría ver a la señora Fernández de la Vega bajar de su helicóptero y subiendo a lo alto de un monte cada vez que quiera leer sus correos electrónicos o mantener una mera conversación por el teléfono móvil, por no tener cobertura. O al señor Cándido Méndez cogiendo patatas, aún a sabiendas de que se las van a comprar por menos de lo que le ha costado cultivarlas. Esta es la realidad que desgraciadamente tenemos de nuestros gobernantes en el campo: pasividad y demagogia.
Espero al menos, que esta presidencia española de la UE sirva para recuperar las ayudas que tenían las mujeres para incorporarse a la explotación agraria. Como saben las personas que se incorporan como titulares a la explotación agraria gozan de unas ayudas que se incrementaban en un 10% cuando la solicitante era una mujer.
Estas ayudas estuvieron vigentes hasta que nuestra ministra Espinosa fue a Bruselas a negociar el Marco Nacional del Desarrollo Rural y se volvió muy satisfecha pero sin ellas. Para ese viaje no necesitábamos alforjas.
Y es que a veces los árboles no dejan ver el bosque… ni tanto humo como nos venden nos deja ver el campo.
LEER MÁS

En Cádiz con Bibiana
15/02/2010
LOLA MERINO
(Presidenta de AMFAR)
El pasado 3 de febrero salí pitando para Cádiz. Me acompañaba Alicia Cabrerizo, la responsable de prensa de Amfar. Asistíamos al primer acto organizado por el gobierno español con motivo de la presidencia de la UE: el Foro Europeo de Mujeres.
Cogimos el AVE en Ciudad Real casi sin comer y con un café muy rápido en la estación. El viaje empezó bien, ya que a sabiendas de que duraría casi cuatro horas, metimos en la maleta de todo, salvo ropa de abrigo y paraguas que casualmente era lo que ibamos a necesitar.
Alicia se llevó hasta un libro para aprender a bucear. La pobre lo intentó con algún tema, pero lo dejó por imposible: "ésta se ahoga en su primera inmersión", pensé. El libro se quedó en el hotel.
Cuando llegamos a Cádiz, nos esperaba el conductor del autobús y una azafata con una carpeta roja donde podías leer "presidencia española de la ue". Llovía, hacía frío y un viento de narices.
Por cierto, a nuestro autobús sólo se subió un chico, Rafael, de la unidad de igualdad del ministerio del Interior. Prudente, observador y parco en palabras. La segunda noche le pregunté en la cena que qué tal lo llevaba con tanta mujer y me contestó: "mi mujer me ha dicho: Rafa, tú haz lo mismo que en casa: oir, ver y callar".
Y llegó el día del Foro Europeo de Mujeres. Salimos del hotel con un policia local escoltando el autobús, me sentía como Angela Merkel en una cumbre europea. La llegada al palacio de congresos fue impresionante: había más policia nacional que en un Madrid-Barça. Todo era azul marino, salvo el colorido de las banderas europeas que zapateaban por el viento que hacía.
No sé para qué tanta policia, si nadie nos pidió dni, ni identificación, ni hubo escaner para acceder al edificio. Y comenzó el acto.
Se abrió el telón y aparecieron: Bibiana con un vestido de volantes rojo en homenaje a su tierra y a su partido. El presidente de Andalucía, que desde que se fue Chaves, nadie sabe como se llama y Teófila Martínez, la eterna alcaldesa de Cádiz. Ella es de Santander, pero los gaditanos la quieren y la protegen como si fuera de la familia.
La alcaldesa estuvo muy protocolaria en sus palabras. La ministra, por primera vez, me sorprendió gratamente y el presidente de Andalucía más vale y se hubiera quedado en su casa. No sólo no aportó nada, sino que sacó el tema de la crisis, que no venía a cuento y dijo: "si Lehman Brothers hubiera sido del sexo femenino no estaríamos en crisis". Y el tío se quedó tan a gusto.
Aplausos, muchos aplausos feministas, más aplausos feministas y ...un café. La ministra es lo que aguantó: un café, porque desapareció. Tuve la ocasión de saludarla un par de minutos, intercambiamos impresiones sobre la próxima revisión de los acuerdos de Pekin en la ONU y se fue...
La reunión no sirvió para mucho o más bien, para casi nada. No tuvimos ningún documento de partida para estudiar, analizar y debatir. Y por tanto, no se ratificó ni se acordó ninguno al término del foro.
Una pena, porque fueron varias las organizaciones de mujeres que vinieron desde distintos países de la UE y muchas más las españolas que estabamos allí. Fue mucho el esfuerzo, el trabajo, el tiempo y el dinero invertido por todas para asistir a un foro que estuvo vacío en contenido, a pesar del gran derroche de medios.
Eso sí, Cádiz y su alcaldesa, bien merecen la pena.
http://plazasenred.es/social/pg/blog/LOLAMERINO/read/1687/en-cdiz-con-bibiana
LEER MÁS