La presidenta de la Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural, AMFAR, Lola Merino, ha destacado hoy que sólo el 2% del total de mujeres dadas de alta en Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias son valencianas, en concreto, sólo 11 de las 471 mujeres que se han adherido a esta figura jurídica en nuestro país.
Así lo ha manifestado durante la clausura de la XXII Jornada de las Mujeres Rurales organizada por AMFAR en Alzira (Valencia) que ha reunido a casi un millar de mujeres de toda la comunidad valenciana.
Merino ha estado acompañada por la presidenta provincial de AMFAR Valencia, Marian Corbí, y por el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado.
La responsable de AMFAR también ha puesto de manifiesto la importancia de definir el futuro papel de las mujeres en la Política Agraria Comunitaria (PAC) para el periodo 2021-2027, y ha recordado que si bien el protagonismo de las mujeres en el sector agrario valenciano tiene más peso que en otras comunidades autónomas, la visibilidad de la mujer debe seguir creciendo en esta materia. “Cabe destacar que desde AMFAR apostaremos para que las mujeres ocupen el centro de las políticas de desarrollo rural, para que estas políticas promuevan la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, que generen empleo de calidad, fomenten la incorporación femenina al sector agrario, que las conviertan en líderes del emprendimiento, que garanticen los servicios sociales, el acceso a las nuevas tecnologías, la reducción de las diferencias retributivas y la corresponsabilidad en el reparto de las tareas familiares y domésticas”.
Además, Merino ha señalado que desde AMFAR van a continuar trabajando para incorporar más mujeres a los órganos de decisión donde la presencia de mujeres es escasa y en ocasiones, prácticamente testimonial. Como es el caso de los Consejos Rectores de las Cooperativas Agrarias, en los que las mujeres representan tan solo el 5%, mientras que las titulares de explotaciones agrarias rondan ya el 30% y las perceptoras de la PAC representan el 37% del total nacional, más del 38% en el caso de la Comunidad Valenciana.
La presidenta nacional ha puesto en valor la trayectoria de AMFAR en Valencia. La única, ha dicho, ligada desde hace más de 30 años a una organización profesional agraria de reconocido prestigio en esta comunidad como es AVA-ASAJA. “Gobierne quien gobierne, tengamos más o menos apoyos institucionales, este multitudinario encuentro de mujeres rurales que cumple su 22 edición, es el fiel reflejo del peso que tiene AMFAR en Valencia, la entidad más representativa de las mujeres rurales”, ha dicho Merino.
En este sentido, Merino ha resaltado el trabajo realizado por AMFAR Valencia durante tres décadas, llevando la voz de las mujeres rurales valencianas ante las administraciones públicas, defendiendo sus derechos, consiguiendo avances importantes en materia de igualdad y reconocimiento de su papel para frenar el despoblamiento y garantizar la supervivencia del sector agrario y de nuestros municipios.
Por último, Merino ha resaltado que hay que poner el acento en las mujeres rurales para frenar la despoblación en España. “El campo español tiene futuro y ofrece oportunidades, pero hay que poner en valor el factor humano, los jóvenes y las mujeres, que deben ser el centro de las políticas agrarias y de desarrollo rural”, ha concluido.
La I Conferencia Internacional de Mujeres de la Pesca, que tiene lugar en Santiago de Compostela del 5 al 7 de noviembre, ha aprobado, por aclamación de los participantes, la “Declaración de Santiago de Compostela por la Igualdad de Oportunidades en el Sector Pesquero y Acuícola”, al finalizar la jornada inaugural.
En el encuentro, organizado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), se ha puesto de manifiesto que las mujeres están presentes en todas las actividades del sector pesquero y acuícola. A pesar de que su contribución es significativa en términos de fuerza laboral y generación de riqueza, su papel no ha sido suficientemente valorado, ni cuantificado.
En la declaración leída por la presidenta de la Asociación Nacional de Mujeres de la Pesca (Anmupesca), Rita Míguez, se señala que la “tradicional invisibilidad femenina en el sector ha derivado en la ausencia de una adecuada conciencia de género, que impide dar respuesta a los problemas y desafíos que afectas a estas trabajadoras”.
Por ello, todos los países y agentes participantes en esta Conferencia “debemos trabajar juntos para incorporar la perspectiva de género en las políticas y estrategias sectoriales, garantizando marcos normativos que velen por la igualdad de trato y no discriminación, así como instrumentos para vigilar y hacer cumplir dichos principios”.
En el documento se aboga por “garantizar la protección de todos los trabajadores del sector (mujeres y hombres) en materia social y de seguridad, para así contribuir a su dignificación profesional”. Especialmente en lo que respecta a las mujeres, hace hincapié “en la mejora de sus condiciones laborales, combatiendo la precarización, la segregación por razón de género, la brecha salarial o las barreras que dificultan la conciliación de la vida laboral, familiar y personal”.
Respecto a la formación profesional en pesca y acuicultura, la declaración resalta que “es imprescindible para promover el empoderamiento y desarrollo profesional” de la mujeres y que contribuirá a “incentivar el emprendimiento femenino” en el sector, para lo que han de establecerse presupuestos públicos y facilitar el acceso de estas emprendedoras a subvenciones o créditos.
Concluye que “es importante favorecer el asociacionismo y liderazgo femenino en el sector, garantizando la presencia de mujeres en los órganos de poder y representación, de esta manera podrán tomar parte activa en las decisiones que les afectan y defender sus derechos e intereses”.
Dentro de la programación de Soria Saludable 2018, la Fundación Científica de Caja Rural de Soria y AMFAR Soria han celebrado el Día Mundial de las Mujeres Rurales con un ciclo de jornadas impartidas distintas comarcas de la provincia con el ánimo de poder llegar a todo el territorio y extenderse a todas las mujeres del medio rural soriano. La última de estas actividades tuvo lugar ayer en la capital soriana.
Las jornadas han llevado por título “Encuentros de proximidad con la mujer Rural: Renacer y Vivir Futuro y Bienestar”. Se enmarcan en el seno de Soria Saludable 2018, cuya presentación completa se llevará a cabo próximamente.
La despoblación requiere a la mujer rural como terreno imprescindible y simiente necesaria para combatirla. Dos programas de la FCCR y de la Soria Mediterránea de las Comunidades Emblemáticas de la DM se enmarcan en el seno de estas Jornadas de Soria Saludable:
1.-Rutas Provinciales de la Dieta Mediterránea: Enmarcadas con gastronomía, visitas culturales, charlas y Centros de producción de la DM en la provincia.
2.-Regreso al Futuro : Huertas y Granjas de la DM para jóvenes universitarios que cultivarán y criarán sus productos en fines de semana para crearles dependencia con el medio rural soriano, dirigidos por hombres y mujeres maduros de los pueblos.
La Jornada celebrada ayer en Soria contó con una charla-coloquio a cargo de Dr. Juan Manuel Ruiz Liso (Director de la Fundación Científica Caja Rural de Soria). y con la intervención de Isabel Goig Soler, autora de varios libros, entre ellos, “Por los fogones sorianos”, “Remedios caseros y otras Magias sorianas” - Lourdes, un referente a nivel Restauración (trufas y setas), gestiona el Centro de Turismo Rural y Restaurante “Los Villares de Soria”.
Esperanza es agricultora. Una gaditana dedicada al cultivo del algodón y del cereal. Está casada y es madre de una niña de dos años.
Esperanza, tú te formaste en Ciencias Económicas, ¿Qué te hizo fijar tu vida laboral en la agricultura?
Estudié Ciencias Económicas en Cádiz y comencé a trabajar muy pronto, a los 23 años, en el sector servicios para una empresa nacional que colaboraba con el Ayuntamiento de la capital gaditana, por lo que ubiqué mi residencia allí.
Con los años fui pensando en formar una familia, pero mi trabajo, en el que estaba muy contenta, no me permitía conciliar mi vida profesional y familiar. Aquello hizo que mi pareja y yo nos replanteáramos nuestro futuro. Mi padre era agricultor de cereal y algodón, fundamentalmente. Le llegaba la edad de jubilación y él quería disfrutarla, por lo que me propuso continuar con el negocio familiar, lo que me permitía tener hijos y que mi marido se dedicaría al trabajo pesado de la casa, y así lo hicimos.
Y te lanzaste…
Sí. En el año 2014 cambiamos nuestra residencia a Bornos, un pequeño pueblo de la provincia de Cádiz, en el que nací y donde mi padre había ejercido como agricultor. A los dos años nació mi pequeña, Marta, y en cuanto pude, volví a mi trabajo en el campo. Mi marido me traía a la niña para que le diera el pecho, cosa que en otros trabajos habría casi imposible.
En los pueblos pequeños tampoco nos lo ponen fácil ya que, por ejemplo, no hay guarderías privadas y la pública tiene pocas vacantes. Las mujeres tenemos poco poder de decisión al no estar involucradas en política ni asociaciones y con la casa, el trabajo y los niños nos queda poco tiempo al día. Además, en los pueblos la mentalidad es más tradicional tanto en hombres como en mujeres.
Cuéntanos cómo fueron tus comienzos en la explotación agraria
A mí no me lo pusieron fácil. He sido la primera mujer que se ha subido a un tractor en estas tierras. Algo impensable hace años, pero poco a poco, pasito a pasito, he ido demostrando que vengo con ganas de quedarme y apostar fuerte por el campo y me he ido ganando el respeto del resto de agricultores de la zona. Aprender el trabajo diario no es fácil, ya que hay pocos “maestros” que tengan la capacidad de enseñar. Además, la formación de organismos oficiales o privados prácticamente no existen.
Agricultora y ahora, defensora de las mujeres rurales gaditanas como Presidenta de AMFAR Cádiz ¿Qué retos te planteas?
En la zona de Bornos hay poco movimiento asociativo para la mujer rural, fundamentalmente por falta de tiempo de las mujeres. Cuando me ofrecieron el cargo de presidenta de AMFAR Cádiz me pareció mucha responsabilidad. Al principio, me asustó un poco: el campo, la oficina, la casa, la familia…, pero luego lo vi como un reto más en mi vida y decidí intentarlo. Espero, poco a poco, conseguir que las mujeres ocupen el lugar que les corresponde y puedan realizarse personal y profesionalmente, sin tener que renunciar a su maternidad.
Valencia ha acogido durante los días 25 y 26 de octubre un encuentro de ámbito nacional de AMFAR.
Entre las participantes en esta pionera iniciativa se encuentran la presidenta de la Federación, Lola Merino, así como representantes de AMFAR de varias provincias como Valencia, Almería, Toledo, Zaragoza, Tenerife, Alicante y Segovia.
AMFAR Valencia, a través de la campaña formativa que cuenta con la colaboración de la consejeria de Agricultura y con fondos del Programa de Desarrollo Rural (PDR), ha reunido tanto en la sede de Valencia como en el centro de experimentación agraria Finca Sinyent que la organización está desarrollando en Polinyà del Xúquer, unas jornadas dedicadas a la promoción de la mujer en el medio rural.
Durante este encuentro de trabajo, la cúpula directiva de AMFAR abordó distintos asuntos de interés para la entidad, tales como el futuro papel de las mujeres en la Política Agraria Comunitaria (PAC) para el periodo 2021-2027, la ausencia de convocatoria de ayudas para la formación de mujeres rurales, o las mejoras necesarias para impulsar la Ley de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, Una norma a la que sólo se han acogido 11 mujeres valencianas de las 447 que actualmente se encuentran dadas de alta en toda España.
La presidenta nacional de AMFAR, Lola Merino, recordó que si bien el protagonismo de las mujeres en el sector agrario valenciano tiene más peso que en otras comunidades autónomas, la visibilidad de la mujer debe seguir creciendo en esta materia. “Cabe destacar que desde AMFAR apostaremos para que las mujeres ocupen el centro de las políticas de desarrollo rural, para que estas políticas promuevan la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, que generen empleo de calidad, fomenten la incorporación femenina al sector agrario, que las conviertan en líderes del emprendimiento, que garanticen los servicios sociales, el acceso a las nuevas tecnologías, la reducción de las diferencias retributivas y la corresponsabilidad en el reparto de las tareas familiares y domésticas”.
Además, dijo, AMFAR trabajará para incorporar más mujeres a los órganos de decisión donde la presencia de mujeres es escasa y en ocasiones, prácticamente testimonial. Como es el caso de los Consejos Rectores de las Cooperativas Agrarias, en los que las mujeres representan tan solo el 5%, mientras que las titulares de explotaciones agrarias rondan ya el 30% y las perceptoras de la PAC representan el 37% del total nacional, el 38,14% en el caso de la Comunidad Valenciana.
El completo programa incluyó la presentación de experiencias de mujeres emprendedoras de distintas provincias, una cena networking, una visita guiada por el centro investigador y una mesa redonda para intercambiar impresiones acerca del emprendedurismo femenino.
Para finalizar, las representantes de AMFAR Valencia han recordado que el próximo día 8 de noviembre, la entidad celebrará la XXII Jornada de la Mujer Rural en Alzira, una cita anual que reúne en torno a un millar de mujeres rurales de toda la geografía valenciana.
La presidenta de la Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR), Lola Merino, ha participado en el Foro Nacional de Despoblación, organizado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en Madrid.
La dirigente nacional ha reivindicado medidas efectivas que impulsen la fijación de mujeres y jóvenes en el medio rural para frenar la sangría demográfica de la mitad de los municipios españoles que se encuentran al borde de la desaparición. “Un pueblo sin mujeres se muere, y hemos de aplicar las fórmulas para que la población femenina quiera quedarse a vivir en el medio rural”, ha señalado Merino.
En su turno de palabra, Merino ha lamentado que el Gobierno de Pedro Sánchez esté planteando medidas como la subida del precio del diesel o la subida de la cuota de autónomos que atacan duramente a la economía rural, agricultores, ganaderos y emprendedores rurales. Medidas que lejos de frenar la despoblación, supondrán más paro, menos mujeres y jóvenes en la actividad agraria, menos autónomos y mayor despoblamiento.
Además, Merino ha reprochado que este año se vayan a perder los fondos destinados a la formación y cualificación profesional de las mujeres rurales. En este sentido, Merino ha solicitado al Ministerio de Agricultura “reconducir esta situación ya que para crear empleo, diversificar la economía y fijar la población, el gobierno nacional no va en la buena dirección”.
El Foro Nacional de la Despoblación ha contado con la participación de la comisionada del Gobierno para el Reto Demográfico, Isaura Leal, y un importante número de representantes de instituciones públicas y privadas afectados por el despoblamiento del medio rural.
REUNIÓN CON LUIS PLANAS, MINISTRO DE AGRICULTURA
También en la jornada de ayer, la sede del Ministerio de Agricultura albergaba una reunión con las entidades nacionales de mujeres rurales, en la que participaron la presidenta nacional de AMFAR, Lola Merino, la secretaria general, Adoración Blanque, y la presidenta de AMFAR Membrilla y directora de la AGROTC – Oficina Nacional de Titularidad Compartida, Mariani Fuentes.
En este encuentro de trabajo, AMFAR puso sobre la mesa su preocupación ante distintas cuestiones que afectan directamente a este colectivo, tales como el papel de las mujeres rurales en la Política Agraria Comunitaria (PAC) en el periodo 2021-2027, las mejoras necesarias para impulsar la Ley de Titularidad Compartida de las Explotaciones Agrarias, así como la ausencia de convocatoria de ayudas para la formación de mujeres rurales.
La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR) y el Ayuntamiento de Membrilla (Ciudad Real) participan por sexto año consecutivo en el Salón Internacional Hortofrutícola, Fruit Attraction, que se celebra del 23 al 25 de octubre en Ifema en Madrid.
La finalidad de ambas entidades es seguir promocionando el melón de la Mancha, el melón piel de sapo, como entidades organizadoras de FERIMEL, Feria Regional del Melón.
El stand de FERIMEL ha contado hoy con la presencia de la directora de la Feria, Gloria Márquez; concejales del Ayuntamiento de Membrilla y de la presidenta de AMFAR Membrilla, Mariani Fuentes quienes han atendido a los numerosos visitantes que se han interesado por la degustación y conocimiento del Melón Piel de Sapo; así como por la celebración de la próxima edición de FERIMEL que tendrá lugar en 2020.
Cabe destacar que la cuarta edición de FERIMEL, celebrada del 2 al 4 de agosto en Membrilla, Ciudad Real, puso sobre la mesa las premisas en las que ya se han empezado a trabajar para siguiente, que se celebrará en el verano de 2020. Una de ellas es conquistar los mercados internacionales con el objetivo de conseguir que Castilla-La Mancha, que es la primera región productora de melón, sea también la primera en exportación.
El cultivo del melón es un cultivo social cuya producción en Castilla-La Mancha alcanza las 250.000 toneladas, de las más de 700.000 que se producen a nivel nacional.
Además, cabe destacar, que de las 23.000 hectáreas que se dedican al cultivo del melón en España, más del 35% están ubicadas en Castilla-La Mancha, de las que el 80% en la provincia de Ciudad Real.
Fruit Attraction, que este 2018 celebra su 10º aniversario, presenta la mayor y más completa de sus ediciones con la participación de 1.600 empresas repartidas en 50.000 metros cuadrados de oferta hortofrutícola, y 70.000 profesionales de 120 países. Unas cifras que para IFEMA y FEPEX, organizadores de la Feria, ponen de manifiesto el interés y respaldo del sector de frutas y hortalizas para impulsar Fruit Attraction como instrumento de internacionalización del sector, y punto de encuentro del conjunto de los profesionales que integran toda la cadena de suministro.