
La presidenta nacional de la Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR), Lola Merino, ha anunciado la puesta en marcha de un Programa formativo de carácter nacional que abordará las Oportunidades que ofrece el Teletrabajo a las mujeres rurales.
La fecha de inicio del programa está prevista para mediados de febrero.
Lo novedoso de este programa, ha explicado Merino, es que los contenidos formativos se impartirán en formato “webinar”, es decir, con vídeos en directo del profesorado que se emitirán a través de un canal cerrado de acceso único para las mujeres rurales que se registren en dicho programa.
Serán 11 sesiones formativas que se estructurarán en dos bloques. El primero de ellos se compone de 5 webinars orientados a la concienciación sobre los beneficios del teletrabajo y las oportunidades que ofrece a las mujeres rurales. Y un segundo bloque que consta de otros 6 webinars, dirigidos a la formación en el uso de las herramientas que posibilitan el teletrabajo. Además, durante la emisión de los vídeos las mujeres beneficiarias del programa podrán plantear sus preguntas y dudas al profesorado.
Asimismo, la presidenta de AMFAR ha destacado que el programa se completa con una campaña de concienciación para que las mujeres rurales conozcan las posibilidades que les ofrece el teletrabajo, además de incidir en la necesidad de formación en este ámbito para que puedan optar a mejores oportunidades laborales.
Merino ha resaltado la necesidad de mejorar la digitalización en el mundo rural no sólo para ofrecer nuevas oportunidades a las mujeres del ámbito rural, sino también para poner freno a la brecha digital territorial y reducir a su vez la brecha de género que sufren las mujeres rurales españolas. Un colectivo, ha dicho Merino, “que se encuentra nuevamente en desventaja por la falta de formación en capacitación y en herramientas digitales, propiciando que las mujeres rurales continúen desempeñando tareas de ámbito doméstico y de cuidados en detrimento de ocupaciones de otra índole profesional”.
Merino trasladó éste y otros asuntos a las directivas de AMFAR en el transcurso de la celebración de la Junta Directiva Nacional y de Amfar Ciudad Real celebradas telemáticamente, en las que además puso de manifiesto el esfuerzo de la entidad por mantener la actividad y el servicio que viene prestando a sus asociadas, a pesar de la difícil situación de crisis sanitaria derivada de la pandemia del Covid-19.

La pandemia del Covid19 nos ha obligado a incorporar términos a nuestras conversaciones y preocupaciones cotidianas tales como incidencia acumulada, confinamiento, estado de alarma, PCR o test de antígenos. Conceptos que han modificado nuestros hábitos y, sobre todo, nuestras relaciones interpersonales.
Además, la gestión de la pandemia ha confirmado que la digitalización y las nuevas tecnologías de la comunicación se han convertido en herramientas clave para afrontar cualquier desafío socioeconómico. Las vídeo-llamadas entre familiares y amigos han sido la solución a las restricciones de movilidad. Padres, estudiantes y profesores nos hemos visto obligados a adaptar la metodología tradicional de enseñanza presencial a un entorno completamente virtual y el teletrabajo se ha impuesto como sistema para mantener nuestra actividad y productividad laboral.
En AMFAR-Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural, al igual que el resto de organizaciones, nos hemos visto obligadas a implementar con urgencia la transformación digital y el teletrabajo para seguir atendiendo las necesidades de las mujeres rurales españolas en este nuevo contexto socio sanitario.
Estamos convencidas que el teletrabajo ha llegado para quedarse, ya que no solo ha supuesto la solución a un problema derivado de la crisis sanitaria del Coronavirus, sino un adelanto de la digitalización que durante años se ha venido demorando en España y sobre todo, en las zonas rurales.
La transformación digital de la ciudadanía, pymes, instituciones, empresas o administraciones públicas a la que ahora estamos abocados, no debería suponer el establecimiento de nuevas discriminaciones o brechas sociales, territoriales y de género, como parece ser que está ocurriendo.
En la actualidad y según se recoge en el Informe 02/2021 sobre “Un Medio Rural Vivo y Sostenible” publicado por el Consejo Económico y Social de España en el año 2021, más de un millón de personas que viven en el mundo rural español no pueden conectarse a internet con una conexión funcional; es decir, superior a 1 Megabites por segundo, lo que directamente les está excluyendo del contexto de digitalización.
Por tanto, si el reto demográfico es uno de nuestros grandes desafíos en este siglo XXI, y si hemos constatado que la digitalización pone freno al problema de la despoblación, ya se debería estar invirtiendo y empleando todos los recursos y medios a nuestro alcance para garantizar una igualdad de oportunidades a las mujeres y hombres que viven en el mundo rural español para poder aprovechar todas las ventajas que ofrece esta nueva era de la digitalización.
Poner freno a la brecha digital territorial contribuye además a reducir la brecha de género que afecta sobre todo a las mujeres rurales. Un colectivo que vuelve a ser el gran perjudicado por la falta de formación en capacitación y habilidades digitales, lo que supone seguir relegando a las mujeres rurales al desempeño de tareas relacionadas con los cuidados o los quehaceres domésticos.
Las mujeres rurales son garantía de futuro para el mantenimiento de nuestros pueblos. Un pueblo sin mujeres se muere. Por tanto, debemos apostar y defender que la digitalización llegue a las zonas rurales para poder conseguir un territorio rural vivo, lleno de oportunidades, en el que, sobre todo, las mujeres y los jóvenes elijan quedarse para desarrollar sus proyectos de vida.

Las mujeres de Tomelloso se suman a la Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR) con la constitución de la directiva local en este municipio.
De este modo, AMFAR amplía su tejido asociativo incorporando a las mujeres de Tomelloso, uno de los municipios de más peso en la provincia.
La presidenta nacional de AMFAR, Lola Merino, presentó el proyecto asociativo de AMFAR y la trayectoria de trabajo de casi 30 años defendiendo los derechos de las mujeres rurales, y animó a la nueva directiva local a participar activamente en todas las actividades que se desarrollan en el seno de la organización.
En el encuentro de trabajo ha quedado constituida la directiva local de AMFAR Tomelloso. La presidenta local será Eloísa Perales, gerente de la Granja Avícola Ecológica La Barja. Le acompañarán en la directiva local cinco mujeres de localidad: Sara Torres; María Vicenta Burrillo, Ana Perales, Pilar Ramírez; y María Rodrigo. Todas ellas mujeres emprendedoras y profesionales ligadas a áreas como la agricultura, la ganadería, el mundo empresarial y financiero.
La recién constituida directiva de AMFAR Tomelloso transmitió a la presidenta nacional, Lola Merino, sus inquietudes y sus ganas de trabajar por este municipio, por la incorporación de sus mujeres al mundo laboral y al desarrollo rural.
“Es una directiva local conformada por mujeres jóvenes, con grandes inquietudes, constituido por agricultoras, ganaderas, miembros de consejos rectores de cooperativas o profesionales de entidades financieras, lo que representa el espíritu emprendedor de las mujeres rurales de nuestra provincia”, precisó Merino, a las que ha augurado un gran éxito en la apertura de la asociación en Tomelloso.

AMFAR Almería ha celebrado este martes en La Mojonera un curso para mujeres con el objetivo de que éstas sepan manejar y conozcan más sobre las diferentes plataformas para la realización de videoconferencias y sobre la utilización de redes sociales.
Este curso de iniciación en el uso y manejo de la TICs se ha llevado a cabo con la colaboración de la Diputación Provincial y formato mixto, presencial y telemático, facilitando de esta manera la participación de aquellas que tienen mayor dificultad para el desplazamiento por motivos laborales o personales.
Adoración Blanque, Presidenta de AMFAR, ha recordado que “la pandemia ha cambiado nuestra forma de trabajar e incluso de relacionarnos y tanto las aplicaciones y plataformas para celebrar reuniones y videoconferencias se han convertido en protagonistas estos meses, de ahí que sea necesaria una formación para poder habituarnos ya que desde entrevistas de trabajo a asambleas o jornadas se han celebrado de forma telemática”.
Por su parte, Carmen Belén López Zapata, Diputada de Igualdad y Familia de la Diputación Provincial, ha valorado de forma positiva este tipo de iniciativas que permiten mejorar la capacitación de las mujeres. “Nuestro tejido asociativo constituye un pilar fundamental y la Diputación Provincial es consciente de su valor, por eso en esta convocatoria se ha contribuido con 100.000 euros para que las asociaciones del Consejo Provincial puedan llevar a cabo proyectos y actuaciones como las dirigidas a mejorar el conocimiento de las nuevas tecnologías, uno de los objetivos de esta actividad que AMFAR celebra en esta ocasión”.
A continuación, Antonio Blanque, CEO de la empresa de Marketing Digital, Ditrali ha explicado el funcionamiento básico y las posibilidades que ofrecen aplicaciones como Zoom “es sin lugar a dudas la más extendida durante esta pandemia”, y Google Meet o Skype. También el curso ha tenido un apartado dedicado a Redes Sociales en el que se ha abordado la creación de perfiles, gestión de la seguridad y la privacidad “hoy en día prestar atención a la privacidad y a la seguridad es un aspecto clave ya no sólo en el uso de las redes sociales sino además en el contacto con las compras online, la gestión de trámites etc.”
AMFAR celebra la acogida y la participación en esta actividad que ha contado con la presencia de alrededor de medio centenar de mujeres y que demuestra la necesidad de continuar mejorando la formación y el conocimiento de los nuevos canales de comunicación y venta que han ido surgiendo en los últimos años, para contribuir de este modo a reducir la brecha digital que se hace más evidente en el mundo rural.

Alrededor de 40 mujeres han participado este lunes en la jornada organizada por AMFAR-Almería con motivo del Día Internacional contra la violencia de género que se ha celebrado en la sede del Instituto Andaluz de la mujer y en la que ha tenido lugar la presentación del Programa Agro-Igualdad que la asociación llevará a cabo a lo largo de 10 meses y en el que se recogen temáticas diversas como la prevención de la violencia de género, la formación en planes de igualdad y uso de nuevas tecnologías, conciliación y roles de género. “Uno de los objetivos del proyecto es dar visibilidad a las mujeres del sector y conseguir que la corresponsabilidad y el reparto de tareas vengan poco a poco a romper con los roles y estereotipos que permanecen aún muy presentes en el medio rural”, ha destacado Adoración Blanque, Presidenta Provincial de AMFAR durante la presentación del proyecto.
El proyecto Agro-Igualdad es una iniciativa de AMFAR que cuenta con la financiación del Instituto Andaluz de la mujer y que se desarrollará en la provincia a lo largo de los próximos 10 meses, a través de jornadas de sensibilización sobre igualdad, violencia de género, conciliación y a través de campañas a través de redes sociales. “Las mujeres rurales suponen una pieza clave para poner freno a la despoblación y por eso se hace necesario avanzar en reivindicaciones históricas sobre las que tenemos que seguir insistiendo y ése es uno de los objetivos de este proyecto”.
Por su parte, Maria Montagut, asesora de programa del Instituto Andaluz de la Mujer en Almería ha trasladado los recursos y funciones que ejerce el organismo en lo que respecta a la víctimas de violencia de género, destacando el asesoramiento, la acogida, la atención jurídica y psicológica a las mujeres y menores víctimas de la violencia que prestan los 16 centros que existen en la provincia ha puesto el acento en el trabajo que también se desempeña con los menores y los jóvenes. Además ha puesto en valor la última campaña puesta en marcha este 25N que apela a la responsabilidad común “los datos son preocupantes, el 44% de los que conocen un caso de violencia de género afirman no hacer nada y sólo el 15% llama a la policía, no podemos dejar toda esta responsabilidad en las víctimas, la violencia es un problema para toda la sociedad”, ha afirmado la responsable del IAM.
La educación como clave para la prevención ha centrado la jornada, en la que Javier García, asesor del Centro del profesorado de Almería ha informado sobre las actuaciones realizadas dentro de los planes de igualdad fijados por Educación y los protocolos con los que cuentan para la formación del profesorado que lleva a cabo una labor pedagógica en los centros y que van más allá de la violencia, ya que incluyen el acoso y el respeto a la identidad de género. Además, ha hecho hincapié el consumo mediático y los roles que se reflejan en las redes sociales por parte de los adolescentes o en el papel clave que juegan las familias y la educación en el hogar.
En esta misma línea, Nadine Sola, educadora social ha abordado la situación violencia de género en el medio rural donde ha señalado que de los 2.357 casos activos por violencia que se dieron en España en 2020, 640 de ellos se encontraban en municipios de menos de 20.000 habitantes, y 185 en la provincia. “El paso más difícil es el de interponer una denuncia, y esto es aún más evidente en los pequeños pueblos”. Así ha reivindicado el papel de los educadores sociales “como pieza fundamental para poder llevar a cabo programas de intervención que lleguen también a las zonas rurales”.
Por último, Antonio Blanque, CEO de la empresa de Marketing digital Ditrali, ha señalado que la independencia económica es fundamental para que las mujeres puedan salir de situaciones de vulnerabilidad y violencia, y ha señalado que gracias a las nuevas tecnologías y al desarrollo de redes sociales y plataformas de comercialización online, muchas de estas mujeres pueden poner en marcha sus propios proyectos profesionales, “ayudando a su empoderamiento, y a su propia recuperación personal y profesional”.

En tiempos de crisis las malas cifras aumentan y la violencia que se ejerce contra las mujeres, lamentablemente no ha quedado al margen. En España han sido asesinadas 37 mujeres en lo qune va de año, el 40% de ellas residían en el ámbito rural. Una cifra que sólo representa la punta del iceberg. Violencia verbal, acoso, abusos, malos tratos,… una violencia silenciada y callada en una inmensa mayoría de los casos.
Desde AMFAR, Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural, somos conscientes de las dificultades a las que se enfrentan las mujeres que son víctimas de la violencia. Unas dificultades que se agravan conforme disminuye la población del municipio en el que residen, ya que los recursos son más escasos, incluso inexistentes.
Según rezan algunos estudios, las denuncias o la búsqueda de ayuda formal o informal ante un caso de violencia decrece desde el 83% de las mujeres que viven en municipios de más de 10.000 habitantes, pasando por el 78% entre las mujeres que viven en municipios de entre 2.000 y 10.000, hasta llegar al 66% entre las mujeres que viven en municipios de hasta 2.000 habitantes.
Ante esta situación, AMFAR considera indispensable poner en marcha actuaciones que hagan superar de una vez por todas este tipo de violencia que se ejerce contra las mujeres; además de diseñar acciones que impliquen a toda la sociedad en su conjunto. Actuaciones que deben centrarse en implementar políticas efectivas que acaben con las brechas que sitúan a las mujeres en situación de inferioridad y vulnerabilidad, como las brechas de conciliación, salariales, sociales, culturales o económicas.
Además, debemos garantizar la asistencia a todas las mujeres, vivan donde vivan y de lo que vivan. La educación en valores igualitarios y de respeto es imprescindible para evitar comportamientos discriminatorios entre mujeres y hombres en un país democrático y moderno como es España y por supuesto, se hace indispensable la inversión en medidas de prevención.
Trabajemos conjuntamente, desde la unidad para poner remedio inmediato a cualquier tipo de violencia. Hagamos todo lo posible para no perder a ninguna mujer más en este duro y peligroso camino, que termina en tragedia dejando familias rotas y huérfanos.
Y termino, resaltando el firme compromiso de AMFAR para eliminar esta lacra social y el apoyo y respaldo a todas aquellas mujeres que necesiten de nuestro acompañamiento para romper el silencio, que es la mejor forma de combatir esta violencia.

La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR) ha impartido un total de 22 cursos dentro del Programa Plurirregional del Formación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
22 actividades gratuitas que se han desarrollado en seis comunidades autónomas, y en las que han participado un total de 360 mujeres rurales. Mujeres de Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Región de Murcia, que han asistido a los cursos tanto con carácter presencial como telemático.
Con el desarrollo de este programa formativo, AMFAR pretende impulsar la incorporación de las mujeres rurales al sector agroalimentario. De este modo, la temática de los cursos ha ido dirigida a la “Agricultura Ecológica”; “Elaboración y Puesta en Valor de Productos Autóctonos”; “Jardinería y Mantenimiento de Ecosistemas”; “Viverismo y producción de semillas ecológicas”; “Transformación de Productos Agroalimentarios” o “Fitosanitarios”, entre otros.
Contenidos muy especializados que han despertado el interés de mujeres con distintos perfiles y ocupaciones, si bien destacan las alumnas con edades comprendidas entre los 25 y los 55 años de edad, que han representado el 61% del total.
AMFAR continúa apostado por impulsar la cualificación de las mujeres rurales con el objetivo ofrecer herramientas a aquellas que quieran emprender en el medio rural. La presidenta nacional de AMFAR, Lola Merino, considera que “debemos dar oportunidades a las mujeres rurales que quieran formar parte del engranaje emprendedor, facilitándoles las herramientas necesarias, aprovechando su talento para encontrar oportunidades laborales en aquellos recursos que vertebran y dan vida a nuestro medio rural”.
Las actividades se han desarrollado dentro del Programa Plurirregional de Formación dirigido a las Mujeres Rurales y ha contado con la financiación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.